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El consumo de azúcar en España no ha parado de descender en la última década. Según datos del Ministerio de Consumo, la población infantil y adolescente consume el 21,5% de la energía de la dieta en forma de azúcares totales. Una parte de la población española toma más del doble del azúcar recomendado por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Uno de los hábitos más arraigados que contribuye a disparar ese consumo de azúcar se produce al endulzar el café que nos tomamos a diario. Para quienes les resulta imposible deshacerse de esta costumbre, la nutricionista Sol Velasco recomienda un truco muy sencillo y no, no se trata de sustituir el azúcar por sacarina u otros edulcorantes.
El tip de esta experta es cambiar la leche normal por leche sin lactosa. Esta última «tiene un sabor bastante más dulce y no te va a saber tan fuerte ni tan amargo el café», asegura la nutricionista. El motivo de que este tipo de leche sea más dulce no es porque lleve azúcar, «sino porque la han hidrolizado. Eso significa que la han partido en unas moléculas más pequeñas y es lo que hace que la leche nos sepa más dulce», aclara.
También aconseja «poner el café algo menos cargado. Evidentemente nunca va a saber tan dulce como si le echas azúcar, pero te prometo que te acabas acostumbrando», indica. Velasco tampoco recomienda abusar de los edulcorantes. Puede ser algo ocasional, «pero si lo haces todos los días tu cuerpo se va a acostumbrar a un sabor demasiado dulce y el cuerpo te va a seguir pidiendo azúcar. Lo mejor es que poco a poco te hagas al sabor natural de los alimentos», concluye.
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